Coches autónomos, qué son y cómo funcionan

Desde hace ya varios años las marcas trabajan en nuevas tecnologías para sus vehículos con el fin de crear coches autónomos y, algunas de ellas como Tesla, ya implementa este tipo de conducción en sus modelos. Los coches autónomos con mayor nivel de conducción independiente, se da en coches eléctricos y vehículos con cambio automático.

Pero hay distintos tipos de coches autónomos ya que este tipo de tecnología se divide en distintos niveles en función de la cantidad de tiempo que el vehículo puede circular sin la necesidad de que el conductor sea partícipe de la conducción.

 

¿Qué son los coches autónomos?

 

Los coches autónomos son aquellos cuya tecnología permite al vehículo detectar todos los obstáculos de la vía, identificar las señales de tráfico, carriles de circulación, reconocer coches, peatones o animales para detenerse o esquivarlos y evitar accidentes y analizar la circulación del tráfico para que el coche autónomo, sin necesidad de que el conductor tenga que intervenir, circule de la mejor forma posible para llegar al destino.

Algunos de estos coches autónomos incluso pueden memorizar trayectos habituales para planificar la ruta con antelación de forma más optimizada para llegar de un punto a otro.

Pero no todos consiguen la tecnología necesaria como para catalogarlo de coche autónomo, ya que hay casos en los que circula de forma independiente por un período corto de tiempo aunque no puede realizar ciertas funciones como esquivar objetos o cambiar de carril automáticamente cuando sea posible.

Actualmente muy pocos coches disponen de una conducción autónoma de nivel 3 en adelante, ya que los países principalmente europeos, no dan permisos ya que no ven una circulación 100% segura.

Representación en 3D de cómo funciona un coche autónomo
Coches autónomos

Coches autónomos: niveles de conducción autónoma

 

Según la Sociedad de Ingenieros Automotrices, la mayor autoridad en el desarrollo de las leyes de movilidad o SAE J3016, son 6 los niveles que identifican los tipos de coches autónomos:

 

Nivel 0 de coche autónomo

 

Son los coches convencionales, sin ningún tipo de autonomía en la conducción donde el conductor tiene el 100% del control sobre el coche.

 

Nivel 1 de coche autónomo o conducción asistida



Este nivel de autonomía se da en los vehículos que cuentan con ayudas a la conducción para el movimiento lateral - cambio de carril - o para la aceleración o deceleración en función del vehículo situado delante.

Es decir, los vehículos que incorporan sistemas de control de velocidad de crucero adaptativo o asistentes para el cambio de carril que no puedan funcionar simultáneamente.

 

Nivel 2 de coche autónomo o autonomía parcial

 

A partir de este nivel el vehículo ya tiene un movimiento independiente por cortos periodos de tiempo, donde puede acelerar o desacelerar e incluso seguir un trayecto con curvas suaves al leer las líneas de los carriles.

Es decir, aquellos coches que combinan los sistemas de control de velocidad de crucero adaptativo y el asistente de cambio de carril de manera simultánea, permitiendo al conductor estar menos tiempo con el pie en el acelerador y las manos en el volante

 

Nivel 3 de coche autónomo o autonomía condicional

 

Con este nivel el coche autónomo sólo necesita la presencia de un conductor si el sistema lo solicita o por algún fallo.

Los coches autónomos aquí son capaces de reconocer el entorno y adelantarse a diferentes tipos de imprevistos, analizarlos y actuar en consecuencia.

Coche autónomo de Mercedes durante una prueba en Alemania
Coche autónomo de nivel 3

Nivel 4 de coche autónomo o de alta autonomía

 

No hace falta la presencia siquiera de un conductor ya que, en caso de fallo, error o una situación de riesgo, cuenta con un sistema de respaldo que ayuda al principal.

 

Nivel 5 de coche autónomo o de autonomía completa

 

En este nivel se encuentran los coches autónomos que no tienen condiciones que puedan limitarles, con algunos modelos sin volante o pedales.

No son muchas las marcas con coches autónomos con un nivel 3 o superior al 3, pero podemos destacar a Mercedes con el denominado Drive Pilot que ya planea implementar en futuros modelos cuando los países acepten este tipo de conducción; o Tesla con el Autopilot que ya está siendo utilizado sobre todo en Estados Unidos.

Coches autónomos Tesla desde una vista del volante
Coches autónomos Tesla

Ejemplos de coches autónomos

 

Un gran ejemplo de coche autónomo es Tesla, que ya se trabaja en su nueva versión Autopilot 4.0 y es probablemente el más desarrollado hasta la fecha.

Estos coches autónomos disponen de ocho cámaras alrededor del vehículo que les permiten tener una visión de 360 grados y un alcance de hasta 250 metros incluso en situaciones de lluvia intensa, neblina y polvo. En esta última versión la potencia del ordenador para procesar datos es 40 veces más alta, lo que le permite tomar varias decisiones de manera simultánea.

De momento hay mucho por debatir sobre esta nueva modalidad de conducción: en caso de accidente ¿quién será el culpable?, toma de decisiones éticas y lo más importante, ¿cuándo podremos fiarnos de este sistema?

Algunas de estas preguntas las responde Mercedes con su Drive Pilot que permite en coches como el EQS o el Clase S, circular sin supervisión del conductor a una velocidad máxima de 60 km/h en determinadas vías durante el día.

Pero la marca alemana ya avisa que esto no exime al conductor de la responsabilidad en caso de accidente ya que debe poder hacerse cargo de la conducción ante cualquier imprevisto y en cualquier momento si el coche autónomo así lo requiere y no permitirá al conductor dormirse durante su activación.

Si éste no ha cumplido con la obligación de estar pendiente de la conducción del coche autónomo, será el responsable de los daños ocasionados en caso de accidente.

Cuadro de mandos digital de un coche autónomo
Coches autónomos

Por otro lado existe Waymo, el primer servicio de viajes autónomos del mundo propiedad de Google. Sus coches autónomos de momento solo funcionan en algunos estados de Estados Unidos e incluso está trabajando en la conducción autónoma de camiones para la entrega de mercancías.

Poco sabemos acerca del futuro pero lo que queda claro es que cada vez hay más marcas que apuestan por los coches autónomos y no será raro ver en 2035 un gran porcentaje de este tipo de vehículos.