Los drones de la DGT
Autor:
Gonzalo Fernández
En los últimos años, la DGT ha incorporado nuevas tecnologías para mejorar la seguridad en las carreteras españolas provocando un aumento de las multas; y una de las innovaciones más destacadas es el uso de drones para la vigilancia del tráfico, una herramienta que promete revolucionar el modo en que se monitorizan las infracciones y se mantiene el orden en las vías.
La Dirección General de Tráfico está dando un giro significativo en su estrategia de control y vigilancia de las carreteras españolas ya que los icónicos helicópteros Pegasus, utilizados durante años para identificar conductas peligrosas al volante, como los excesos de velocidad, están siendo reemplazados por una alternativa más moderna y versátil.
La despedida de los helicópteros Pegasus para usar drones de a DGT
Los Pegasus han sido una herramienta crucial para la DGT en la detección de conductas infractoras en las carreteras españolas, desde su capacidad para identificar excesos de velocidad hasta la detección de conductores distraídos o con acciones temerarias que pongan en peligro al resto de usuarios de la vía, convirtiéndose en una parte integral de la estrategia de vigilancia de tráfico.
Sin embargo, con el avance de la tecnología, la DGT ha decidido apostar por una alternativa más eficiente y, sobre todo, económica, pues su mantenimiento dispara los costes de su uso.
Pero también tiene otros problemas:
- Disminución de operatividad: Según el sindicato de Funcionarios (CSIF), sólo seis de los trece helicópteros Pegasus estaban operativos, dejando regiones como Andalucía y A Coruña sin vigilancia.
- Contratos de mantenimiento desiertos: La falta de licitaciones para el mantenimiento de estas aeronaves ha generado preocupación sobre la continuidad del servicio.
Ante esta situación, se ha tomado la decisión de reemplazar los helicópteros por drones, de la DGT, una solución más moderna y eficiente.
El nuevo dispositivo: Drones de la DGT
El reemplazo de los helicópteros Pegasus viene de la mano de la nueva acogida de drones de la DGT ya que ofrecen una serie de ventajas sobre sus predecesores, incluyendo un funcionamiento más sencillo y un menor coste de mantenimiento.
Además, los drones son capaces de acceder a áreas de difícil alcance para los helicópteros, lo que los hace especialmente útiles en entornos urbanos y montañosos; por no mencionar la menor posibilidad de que los conductores sean capaces de detectarlos.
Capacidades y funcionamiento de los drones de la DGT
Los drones de la DGT están equipados con cámaras de alta resolución y sistemas de medición que les permiten captar y registrar infracciones en tiempo real y, aunque inicialmente estos drones no pueden multar por exceso de velocidad debido a la falta de cinemómetros, su función principal se centra en detectar otras infracciones como el uso indebido del teléfono móvil, la falta del cinturón de seguridad, y el no respeto a las distancias de seguridad con ciclistas.
Estos drones operan a una altura de 120 metros y pueden alcanzar velocidades de hasta 80 km/h, con una autonomía de vuelo de aproximadamente 40 minutos antes de necesitar un cambio de batería y su rango de acción puede llegar hasta los 10 km, aunque suelen operar dentro de una línea de visualización que va de uno a dos kilómetros, dependiendo de las necesidades y la zona de vigilancia.
Los drones representan una innovación significativa en la vigilancia del tráfico y sus ventajas son claras:
- Menor riesgo humano: Los drones eliminan el riesgo de pérdida de vidas humanas en caso de accidente.
- Costes de operación reducidos: Comparados con los helicópteros, los drones tienen costes de reparación y mantenimiento considerablemente más bajos.
- Mayor discreción: Su tamaño reducido los hace prácticamente invisibles cuando vuelan a grandes alturas.
¿Por qué el cambio a los drones de la DGT?
La decisión de jubilar los Pegasus y adoptar los drones de la DGT como principal herramienta de vigilancia responde a varias razones.
En primer lugar, el avance tecnológico ha hecho que los drones sean una opción más viable y eficiente ya que el coste de mantenimiento de los helicópteros es considerablemente mayor que el de los drones, lo que representa un ahorro significativo para la DGT a largo plazo.
La DGT ha llegado a un acuerdo con Xiaomi - que ahora también fabrica coches como el Xiaomi SU7 - para suministrar una amplia flota de drones que promete mejorar la eficiencia del control del tráfico en España ya que no sólo serán capaces de controlar la velocidad, una tarea anteriormente reservada a los Pegasus, sino que también podrán enviar datos en tiempo real.
El centro de control en China
Uno de los movimientos más sorprendentes de la DGT es el traslado de su centro de control a China, específicamente a la ciudad de Shenzhen buscando aprovechar la tecnología y los recursos disponibles en el país asiático para mejorar la gestión del tráfico en España permitiendo una comunicación bidireccional con el centro de control de la DGT en Madrid y agilizando los procesos de gestión y supervisión.
